Las cirugías de pecho no fueron suficientes para ocultar las lonjas y la celulitis de una cincuentona que intentaba cantar cumbia-electro-rock-ranchero en medio de un potrero con excremento de vaca.

Entre abucheos y hasta mentadas de madre se desarrollo el lamentable evento de Ninel Conde en el núcleo de la feria de Sayula, misma que olía a excremento y vomito. El olor a fecales no impidió a Nionel salir al triste escenario que consistía en un par de tubos y focos de iluminación. Ninel vestida de Fichera intento prender al publico pero sin éxito. Primero por su horrible voz, segundo por la ecenografia pobre y en 3er lugar por carecer de todo tipo de expresión artística en su presentación.

En menos de 3 minutos, la orquesta que acompañaba a Ninel Conde paso de música electrónica a heavy metal, de ahí a música ranchera y de banda para terminar tocando cumbias.

El evento que había sido anunciado como gratuito fue todo lo contrario, existía una zona VIP exclusiva para los miembros del comité carnaval presidido por Daniel Carrión. Dicha zona dividía a la población entre los pobres de 2da clase, y los pobres que pagaron 500 pesos para el área VIP sin darse cuenta de que la mesa estaba puesta sobre excrementos, orines a vómitos.

Y es que los sanitarios móviles que fueron instalados en el núcleo de la feria no fueron suficientes y carecían de higiene. Un charco de orines y vomito de hasta 5 cm de altura mojaba los zapatos y zapatillas de los invitados, ni la propia Ninel Conde se salvo de salpicarse los talones con suciedad.