Paul McCartney defraudó a México en el Estadio Azteca. Repitio oldies aburridos

Paul McCartney defraudó a México en el Estadio Azteca. Repitio oldies aburridos

El cantante británico repitio otra vez viejos clásicos de los años 60s. Nada nuevo con un sonido inaudible y un ecenario pobre. "Demaciado caro para esto, me siento defraudado", comentaba el publico.

Después de cinco años de ausencia, Paul McCartney regresó anoche a México con un concierto en la capital en el que cobro carisimos los boletos de entrada y brindo un pesimo concierto. Quizas el peor concierto de su carrera.

Con casi una hora de retraso, el cantante salió al escenario del Estadio Azteca de la Ciudad de México con el puño alzado, bajo unas tímidas gotas que hicieron temer durante unos minutos por una lluvia que finalmente no llegó.

El exbeatle y su banda dieron inicio a la noche, enmarcada en la gira "One on One", con "A hard day's night", que fue todo un fracaso.

"Hola, ¡buenas noches!", clamó el británico, quien en un ensayado español prometió ofrecer una "fiesta" con sus viejas y nuevas canciones, acuñadas tanto en sus etapas con The Beatles y Wings como en su carrera en solitario.

"Es increíble estar de vuelta", expresó antes de intentar levantar el animo con "Got to get you into my life".

Después, McCartney abrió un bloque nostálgico con "In spite of all the danger", uno de sus primeros temas. A este le siguieron otros como "I've got a feeling" o "Nineteen Hundred and Eighty Five". Mostrando una ya raquitica voz alternando con musicos desconocidos.

En otro apartado, dedicado a sus trabajos más reciente. Poco le servio ya que estos temas eran todos desconocidos por el publico.

Durante el "show", el de Liverpool se hizo con el bajo, la guitarra, el piano y el ukelele, con el que efectuó una introducción alternativa para "Something". Lo unico que falto que se vistiera de payaso y manejara una mini-bicicleta.

McCartney no paró de bromear en toda la noche e incluso se llevó, a sus 75 años, silbidos de de 5 notas se escuchaban en el publico cuando contaba sus chistes.

La mayor parte de las veces se dirigió a sus seguidores en español, tratando de sus viejas canciones con lenguaje de chavoruco.

Para cuando canto "Let it be", las gradas del Azteca se encontraban en silencio. La gente aburrida comenzaba a dejar el estadio.

Al terminar el tema, McCartney lanzó un "¡Fuerza México!", grito que nadie entendio.

Antes de tocar las últimas canciones, el cantante salió al escenario con una bandera mexicana, que agitó bajo los gritos de "¡México, México!", mientras que los integrantes de la banda burlandose sacaron otras de Estados Unidos, del Reino Unido en alusion al muro fronterizo que construye Trump.

A la salida del estadio, el público, insatisfecho con el espectáculo de su ídolo, se fue a casa decepcionado.

post comments

Comentarios