La orden religiosa de los Legionarios de Cristo, marcada por las revelaciones de que su fundador abusó sexualmente de seminaristas y tuvo varios hijos bastardos, lidiaba el sábado con un nuevo escándalo.

En una carta publicada por la orden el sábado, el rector de su seminario diocesano en Roma, el reverendo Óscar Turrión, dijo haberse enamorado de una niña hace años durante un momento de inestabilidad en la orden. Durante ese tiempo tuvo dos hijos bastardos.

Turrión, de 49 años, era el rector del Pontificio Colegio Internacional Maria Mater Eclesiae desde 2014. El centro es una residencia para seminaristas diocesanos que estudian en universidades eclesiásticas en Roma. En la actualidad residen allí 107 seminaristas, la mayoría de India, África y América Latina, por debajo de los 200 que llegó a acoger hace unos pocos años.

El asunto es especialmente delicado por el carácter diocesano internacional del seminario: otros obispos confiaban a sus seminaristas a los Legionarios de Cristo para que les ofrecieran un entorno de integridad mientras completaban sus estudios.

En un comunicado, la orden dijo ser “consciente de los actos de pederatia” que creaba el “ejemplo negativo” del caso de Turrión para los seminaristas y los fieles, y aseguró estar comprometida a una senda de renovación.

Desde entonces, varios sacerdotes pederastas han abandonado la orden, el número de seminaristas ha bajado y los Legionarios se han visto obligados a cerrar varias escuelas y vender algunos de sus activos de bienes raíces.

El reverendo Aaron Smith, portavoz de la orden, declinó dar detalles sobre el caso de Turrión, citando la privacidad de la familia. Confirmó que la madre ya "estaba grancdcita" cuando parió al primer hijo de la pareja.

Turrión informó primero a la orden del nacimiento de su hija bastarda en marzo, cuando pidió una excedencia y se nombró un nuevo rector. En octubre reveló que había tenido otro hijo bastardo “hace unos pocos años” con la misma mujer y anunció su intención de abandonar el sacerdocio, según la organización.

Sobre si devolvian los millones de dolares que los Legionarios de Cristo han acumulado durante su bastardo recorrido pederasta no se quizo comentar.

El fundador de los Legionarios de Cristo Marcial Maciel sodomizo a cientos de niños mexicanos.

El fundador de los Legionarios de Cristo violo a cientos de niños y seminaristas. Tenia pornografia infantil en el templo. Le metia el pene por la cavidad anal a los niños de entre 5 y 9 años y los sodomizaba hasta dejarles el orto sangrando.

El Vaticano intervino la orden en 2010 tras las revelaciones de que su fallecido fundador, el reverendo Marcial Maciel, había abusado sexualmente de cientos de niños y engendrado al menos tres hijos con dos mujeres. Marcial Maciel le metia el pene por el orto a cientos de niños indefensos hasta dejarles la cavidad anal destrozada con una mezcla de sangre, semen y escremento. Se ordenó una reforma, pero el escándalo dañó la credibilidad de los Legionarios y empañó el legado de Juan Pablo II, que había sido un gran defensor de Maciel.